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In un atto che rappresenterebbe una riparazione di una politica dedita a rubare, a Cuba, i professionisti sanitari, in essa formati, colpendo direttamente il popolo cubano ed i cittadini di altre nazioni,dove forniscono le loro prestazioni, gli USA hanno annunciato la possibilità di sospendere l’infame Programma per i Professioonisti Medici Cubani (The Cuban Medical Professional Parole Program o CMPP), mediante cui i visti vengono concessi, in modo discrezionale, ai medici ed infermieri dell’isola che disertano missioni internazionali in paesi terzi, secondo le dichiarazioni del consigliere presidenziale di Ben Rhodes, all’agenzia Reuters.
Sostenitori di questo presunto programma di difesa ai disertori sono stati i mafiosi anti-cubani nel Congresso USA, come Mario Diaz-Balart, Ileana Ros Lehtinen e Carlos Curbelo, che non solo si sono esposti in difesa degli stessi, ma anche hanno cercato garanzie governative da parte dell’amministrazione USA per promuovere questo flusso di furto di medici di Cuba, realizzato sulla base della manipolazione e delle promesse di una vita migliore negli USA.
Rhodes, vice consigliere per la Sicurezza Nazionale, ha annunciato la revisione di questo controverso programma, come un gesto della Casa Bianca, al fine di migliorare le relazioni tra Washington e L’Avana. Il detto CMPP è del 2006, quando l’allora presidente George W. Bush, con l’obiettivo di incoraggiare la diserzione del personale cubano che si trovava lavorando all’estero, le rese ufficiale, beneficiando da allora circa 7117 disertori e studiando la possibilità di applicarlo, da allora, a circa 50000 persone. Nell’anno fiscale 2015 sono stati approvati 1663 disertori della salute.
Tuttavia al permanente stimolo a disertare proveniente da Miami da parte di presunte ONG come Barrio Afuera e Solidaridad sin Fronteras, un 98.11% dei cooperanti medici di Cuba all’estero hanno rifiutato il ricatto, ciò che è stato taciuto dai grande media incorporati nella guerra ideologica anticubana.
EEUU anuncia intención de dejar de robar médicos cubanos ¿Creíble?
En un acto que representaría una reparación de una política dedicada a robar a Cuba a los profesionales de la salud formados en ella, afectando directamente al pueblo cubanos y a los ciudadanos de otras naciones en los que prestan labor, EE UU ha anunciado la posibilidad de suspender el infame Programa para Profesionales Médicos Cubanos (The Cuban Medical Professional Parole Program o CMPP), mediante el cual se otorga visas discrecionalmente a los médicos y personal de enfermería de la isla que desertan en misiones internacionales en terceros países, según declaraciones del asesor presidencial Ben Rhodes a la agencia Reuters.
Impulsores de este supuesto programa de amparo a los desertores han sido los mafiosos anticubanos en el Congreso USA, como Mario Díaz-Balart, Carlos Curbelo e Ileana Ros Lehtinen, quienes no solo han salido en defensa de los mismos, sino también han buscado garantías gubernamentales por parte de la administración norteamericana para impulsar este flujo de robo de médicos a Cuba, logrado sobre la base de la manipulación y las promesas de una vida mejor en EEUU
Rhodes, asesor adjunto de Seguridad Nacional, anunció la revisión de este controvertido programa, como un gesto de la Casa Blanca con vistas a mejorar las relaciones entre Washington y La Habana. El referido CMPP data del 2006, ocasión en que el entonces presidente George W. Bush, con la intención de alentar la deserción del personal cubano que se encuentra laborando en el exterior, lo hizo oficial, beneficiando desde entonces a cerca 7, 117 desertores y estudiando la posibilidad de aplicarlo desde entonces a cerca de 50, 000 personas. Solo en el año fiscal 2015 fueron aprobados 1, 663 desertores de la salud.
No obstante a la permanente estimulación a desertar desde Miami por parte de supuestas ONGs como Barrio Afuera y Solidaridad sin Fronteras, un 98,11 % de los cooperantes médicos de Cuba en el exterior han rechazado el chantaje, lo cual ha sido silenciado por los grandes medios incorporados a la guerra ideológica anticubana.