6 dicembre 2005
El comandante
Chávez aseguró que la abstención es un mal que arrastramos de la IV
República, sin embargo, pidió a los venezolanos demostrar la
participación que día a día ejercen, en las urnas electorales. Aseguró
que ya comenzó la batalla para ganar las presidenciales con diez
millones de votos
“Nadie puede atribuirse
la abstención como una bandera de victoria”, así lo afirmó el
presidente de la República Bolivariana de Venezuela, comandante Hugo
Chávez Frías, durante el acto de graduación de la III oleada de la
Misión Ribas.
Desde el Teatro Teresa Carreño, el presidente Chávez aseguró que la
abstención estructural proviene de la IV República, en donde se generó
la visión según la cual las elecciones parlamentarias no eran
importantes. Sin embargo, señaló que es necesario derrotar ese
paradigma y llevar el nivel participativo de la población a las urnas
electorales.
“La democracia es participativa a diario, la Misión Ribas es un motor
participativo de la democracia nueva. Todos los días en Venezuela hay
un amplio nivel de participación en distintos ámbitos, pero tenemos
que lograr que esa participación sea también para los días de
elecciones, sea cual sea el cargo que vamos a elegir”:
El presidente Chávez consideró que las votaciones “deben ser tomadas
como una responsabilidad de cada militante de la revolución”.
Aseguró que “hay que ser autocríticos” pero resaltó que “las
elecciones fueron un éxito y los organismos y observadores
internacionales, sin excepción alguna, ni uno solo ha dicho lo
contrario, han dicho expresa y claramente que el proceso electoral fue
legítimo y transparente.
Diez millones para el 2006
El comandante Chávez reiteró que en las elecciones presidenciales de
diciembre de 2006 “vamos a sacar diez millones de votos” y
seguidamente citó el libro El oráculo del guerrero: ’cuando termine
una batalla, guerrero, no pierdas tiempo envainando la espada, mañana
vendrá otra batalla’. “Terminó esta batalla, no voy a envainar mi
espada. Hoy mismo entro en batalla para ganar con 10 millones de votos
las elecciones de diciembre”.
Posición del Ministerio de Relaciones Exteriores con respecto a las elecciones parlamentarias 2005 y las declaraciones preliminares de los observadores internacionales |
6 dicembre 2005
Concluido de manera pacífica el proceso electoral para la nueva
Asamblea Nacional y conocidos los pronunciamientos preliminares, tanto
de los observadores de la Unión Europea como de la Organización de
Estados Americanos, son necesarias algunas consideraciones sobre los
hechos y la apreciación que se hace de los mismos. En espera de la
declaración final, por el momento nos limitaremos a algunas
consideraciones, también preliminares, para un pronunciamiento oficial,
si es que el mismo fuere necesario.
Tal como lo afirma la Misión de la Unión Europea, el Consejo Nacional
Electoral ha jugado un rol positivo al introducir las medidas de
seguridad y transparencia en el sistema automatizado del voto de
acuerdo con las más avanzadas prácticas internacionales. Por su
parte, la Misión de la OEA destaca que los esfuerzos emprendidos
por el CNE en el cumplimiento de su mandato para automatizar el voto,
merecen reconocimiento.
Por otro lado, ambas instituciones reconocen la acogida favorable que
dio el Consejo Nacional Electoral a distintas solicitudes de los
sectores de oposición, como ocurrió el retiro de las máquinas capta
huellas, una de las diversas condiciones que levantó la oposición
para concurrir a la votación. Tal actitud, así se reconoce
explícitamente, contribuyó al desenvolvimiento pacífico que
caracterizó el hecho mismo del proceso electoral. Tal como lo destaca
la Misión de la OEA a pesar de las importantes garantías otorgadas
por el CNE, a petición de ese significativo sector de la oposición,
éste decidió no concurrir finalmente al evento electoral.
Por tal razón, han expresado su sorpresa ante el incumplimiento de los
compromisos adquiridos por las organizaciones políticas que, sin
ninguna justificación, se retiraron del proceso.
Como bien lo expresa la declaración de la OEA, la participación
electoral es lo que contribuye al fortalecimiento de la democracia y
la legitimidad de las instituciones representativas (…) aunque se
reconoce el derecho a no participar, resulta preocupante que por el
retiro de la oposición, un sector importante de loa ciudadanía se
quede sin representación en la Asamblea Nacional. Toda democracia
requiere de una oposición institucional comprometida con la vía
electora, para que pueda participar con lealtad en el sistema
democrático.
Por tales razones, manifiestan unja seria preocupación por el hecho de
que un sector importante de la ciudadanía se quede sin representación
en la Asamblea Nacional, debido al súbito retiro de las organizaciones
de la oposición que ya habían postulado sus candidatos.
Sin embargo, llama la atención que no se haga absolutamente ninguna
referencia a los distintos actos terroristas consistentes en la
colocación de explosivos en distintas partes del país, incluyendo la
propia sede del Consejo Nacional Electoral, así como la voladura del
oleoducto que suministra petróleo al Centro Refinador de Paraguaná, la
más importante refinería del mundo. Tales acciones contra el proceso
democrático venezolano fueron eficazmente neutralizada por la acción
eficiente de los órganos de seguridad del Estado. A las mismas, se
agregó la ola de rumores y el llamado expreso de algunos sectores de
la oposición a no participar en los comicios, con el objetivo de
desalentar a los votantes y fomentar la abstención.
Dadas ciertas afirmaciones contenidas en ambas declaraciones,
invitamos a los observadores a contribuir, como lo han manifestado, a
fortalecer el proceso democrático venezolano, tomando adecuada
distancia de ciertas apreciaciones difundidas por la oposición
venezolana como aquellas que tienden a exagerar el factor de la
abstención en este último proceso como si se tratara de un fenómeno
inédito y omitiendo su responsabilidad en el conjunto de acciones
desplegadas para impedir la libre participación de los ciudadanos en
el ejercicio de su derecho a elegir.
Igualmente recomendamos no ignorar que este gobierno ha invitado en
reiteradas oportunidades, como lo hace una vez más por este medio, al
diálogo sincero, despojado de la intención de imponer la voluntad de
la minoría a lo que son decisiones ampliamente mayoritarias del pueblo
venezolano.
Finalmente, manifestamos nuestra coincidencia con los respetables
miembros de ambas misiones, en que toda norma jurídica es perfectible.
Tal es el caso de la Ley Electoral venezolana, como igualmente ocurre
con las leyes europeas, que probablemente han contribuido a los altos
índices de abstención que se observaron, por ejemplo, en las últimas
elecciones al Parlamento Europeo.
No desmayará el gobierno venezolano en sus esfuerzos por profundizar
la participación y ampliar, cada vez más, las prácticas democráticas,
más allá de la simple elección periódicas de órganos representativos,
el esfuerzo inagotable por perfeccionar nuestro sistema democrático y
sus instituciones. En este talante, estamos abiertos a recibir toda
recomendación que, exenta de intenciones intervencionistas en nuestros
asuntos internos, tengan a bien hacernos los hombres y mujeres de
buena fe.
MRE