Gli USA sanzionano navi che trasportano petrolio tra Venezuela e Cuba
Sergio Alejandro Gómez www.cubadebate.cu
Gli USA hanno sanzionato, questo venerdì, le imbarcazioni e le società che partecipano al trasporto di combustibile tra Cuba e Venezuela, un’attività legale e protetta con accordi commerciali tra i due paesi.
L’Ufficio di Controllo degli Attivi Stranieri (OFAC) del Dipartimento del Tesoro ha incluso nella sua lista di sanzionati 34 navi di proprietà della compagnia petrolifera venezuelana PDVSA e due società straniere che, come sostenuto da Washington, prestano servizio a Caracas per l’invio di greggio alla maggiore delle Antille.
Si tratta di Ballito Shipping Incorporated, con sede in Liberia, e ProPer In Management Incorporated, con sede in Grecia.
“Queste misure sono un atto di extraterritorialità, ingerenza e superbia”, ha assicurato su Twitter il presidente dei Consigli di Stato e dei Ministri, Miguel Diaz Canel.
“Dato il fallimento dei tentativi di cambio di regime in Venezuela, Washington ricorre a svergognate menzogne per giustificare la sua condotta crescentemente aggressiva”, ha segnalato da parte sua il ministro degli Esteri Bruno Rodríguez Parrilla. “L’attacco contro PDVSA e le sue navi è un atto di pirateria”, ha aggiunto su Twitter.
Le azioni di Washington sono dirette contro attività legittime di paesi terzi sui quali gli USA non hanno alcuna autorità, ciò che viola le norme fondamentali del diritto internazionale e la sovranità di nazioni indipendenti.
“Stiamo prendendo provvedimenti contro una fonte vitale della ricchezza del regime di Maduro, seguendo ordini del presidente (Donald) Trump”, ha detto il vicepresidente USA, Mike Pence, durante una visita a Houston, Texas, il cuore petrolifero USA.
Pence si è recato in quella città per incontrarsi con venezuelani che sostengono il rovesciamento del legittimo governo di Nicolas Maduro e offrire sostegno alla figura di Juan Guaidó, l’autoproclamato presidente venezuelano che ogni giorno perde più sostegno e che ha fallito nel compimento degli obiettivi di Washington.
“Stiamo prendendo azioni contro navi ed organismi che trasportano petrolio ed offrono un vitale aiuto per mantenere l’illegittimo regime di Maduro” ha indicato, da parte sua, in una dichiarazione il segretario al Tesoro Steven Mnuchin.
Mnuchin ha sottolineato che “Cuba continua approfittandosene e sostenendo il regime attraverso meccanismi di petrolio per repressione per mantenere Maduro al potere”.
Le parole del segretario al Tesoro fanno eco alle manipolazioni del senatore della Florida, Marco Rubio, e del consigliere della sicurezza nazionale della Casa Bianca, John Bolton, che fanno parte di un gruppo radicale di consulenti che ha sequestrato la politica dell’attuale amministrazione verso l’America Latina in generale e Cuba in particolare.
Nel suo account sul social network Twitter, Rubio ha annunciato più sanzioni per L’Avana, nelle prossime settimane, e si è rallegrato che questo fosse un “brutto giorno per Cuba”.
Secondo il Dipartimento del Tesoro, le sanzioni includono il congelamento delle attività finanziarie che possano essere sotto la giurisdizione USA ed il divieto di transazioni finanziarie con le entità e le imbarcazioni incluse nell’elenco.
Le nuove misure di aggressione si aggiungono all’elenco dei blocchi, sabotaggi economici e tentativi di colpo di stato che Washington applica contro la Rivoluzione Bolivariana.
Essi sono inoltre progettati per stringere il blocco economico sul Venezuela, mentre si cerca di danneggiare l’economia cubana, due dei membri della cosiddetta “troika” di nazioni che non sono di gradimento USA, da quanto detto da Bolton a Miami nel novembre dello scorso anno.
Gli USA pretendono creare paura ed incertezza tra le imprese ed i paesi che commerciano o si relazionano con il Venezuela, nello stesso modo in cui agisce la legge Helms-Burton contro Cuba dal 1996, la stessa che ora si pretende rafforzare con le minacce di piena attivazione del suo controverso Titolo III.
Tuttavia, la stragrande maggioranza delle nazioni del mondo riconosce il governo di Nicolas Maduro e solo poco più di 50 hanno optato per Guaidó, il presidente nominato da Washington.
Nueva agresión extraterritorial: Estados Unidos sanciona a barcos que transportan petróleo entre Venezuela y Cuba
Por: Sergio Alejandro Gómez
Estados Unidos sancionó este viernes a embarcaciones y compañías que participan en el transporte de combustible entre Cuba y Venezuela, una actividad legal y amparada en acuerdos comerciales entre ambos países.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro incluyó en su lista de sancionados 34 embarcaciones propiedad de la petrolera venezolana PDVSA y a dos compañías extranjeras que, según alega Washington, presentan servicio a Caracas para el envío de crudo a la mayor de las Antillas.
Se trata de Ballito Shipping Incorporated, con sede en Liberia, y ProPer In Management Incorporated, con base en Grecia.
“Estas medidas son un acto de extraterritorialidad, injerencia y de soberbia“, aseguró en Twitter el presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel.
“Ante fracaso de intentos de cambio de régimen en Venezuela, Washington acude a mentiras desvergonzadas para justificar su conducta crecientemente agresiva”, señaló por su parte el canciller Bruno Rodríguez Parrila. “Ataque contra PDVSA y sus buques es un acto de piratería”, añadió en Twitter.
Las acciones de Washington van dirigidas contra actividades legítimas de terceros países sobre los cuales Estados Unidos no tiene potestad alguna, lo cual viola las normas elementales del derecho internacional y la soberanía de naciones independientes.
“Estamos tomando medidas contra una fuente vital de la riqueza del régimen de Maduro, siguiendo órdenes del presidente (Donald) Trump”, dijo el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, durante una visita a Houston, Texas, el corazón petrolero norteamericano.
Pence viajó a esa ciudad para reunirse con venezolanos que apoyan el derrocamiento del gobierno legítimo de Nicolás Maduro y ofrecer apoyo a la figura de Juan Guaidó, el autoproclamado presidente venezolano que cada día pierde más apoyo y que ha fracasado en el cumplimiento de los objetivos de Washington.
“Estamos tomando acciones contra barcos y entidades que transportan petróleo y ofrecen una ayuda vital para mantener el régimen ilegítimo de Maduro”, indicó por su parte en un comunicado el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.
Mnuchin remarcó que “Cuba continúa aprovechándose y respaldando al régimen a través mecanismos de petróleo por represión para mantener a Maduro en el poder”.
Las palabras del secretario del Tesoro hacen eco de las manipulaciones del senador por la Florida, Marco Rubio, y el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Bolton, quienes forman parte de un grupo radical de asesores que ha secuestrado la política de la actual administración hacia América Latina en general y a Cuba en específico.
En su cuenta en la red social Twitter, Rubio anunció más sanciones para La Habana en las próximas semanas y se alegró de que este fuera un “mal día para Cuba”.
De acuerdo con el Departamento del Tesoro, las sanciones incluyen la congelación de los activos financieros que puedan tener bajo jurisdicción estadounidense y la prohibición de transacciones financieras con las entidades y embarcaciones incluidas en el listado.
Las nuevas medidas de agresión se suman a la lista de bloqueos, sabotajes económicos e intentos de golpe de Estado que aplica Washington contra la Revolución Bolivariana.
Están diseñadas además para estrechar el cerco económico sobre Venezuela al tiempo que se busca afectar la economía cubana, dos de los miembros de la llamada “troika” de naciones que no son del agrado norteamericano, según dijo Bolton en Miami en noviembre del año pasado.
Estados Unidos pretende generar miedo e incertidumbre entre las empresas y países que comercian o se relacionan con Venezuela, de la misma manera que actúa la ley Helms-Burton contra Cuba desde 1996, la misma que se pretende ahora fortalecer con las amenazas de activación plena de su polémico Título III.
Sin embargo, la inmensa mayoría de las naciones del mundo reconoce al gobierno de Nicolás Maduro y solo un poco más de 50 se han decantado por Guaidó, el presidente designado por Washington.
La Asamblea General de las Naciones Unidas apoya cada año el fin del bloque contra Cuba y crítica sus efectos extraterritoriales.
Washington trata de cubrir sus acciones con un manto de legitimidad, al alegar que fue la Asamblea Nacional de Venezuela, un órgano declarado en desacato por el poder judicial, la que determinó la prohibición de exportar petróleo a Cuba.
Guaidó pidió a comienzos de marzo a los Estados Unidos que lo “ayudara” a frenar los envíos a Cuba, que forman parte de un convenio que ofrece cobertura de salud a millones de sus compatriotas, los mismos que dice representar aunque ninguno lo haya elegido en las urnas.
El líder histórico de la Revolución, Fidel Castro, y el Comandante Hugo Chávez, firmaron el 30 de octubre del año 2000 el Convenio Integral de Cooperación Cuba-Venezuela, un tratado que abrió la posibilidad para que decenas de miles de profesionales cubanos prestaran servicios en la nación bolivariana en sectores claves como la educación y la salud. Venezuela, por su parte, ofreció garantías a Cuba para el suministro de combustible que antes se debía importar de destinos más lejanos y costosos.
A través de la Misión Barrio Adentro, médicos cubanos han llevado a cabo más de 1300 millones de consultas a pacientes venezolanos, salvando potencialmente millones de vidas.
Las zonas más apartadas de la geografía venezolana recibieron un médico por primera vez en la historia.
De igual manera, más de 60 mil pacientes venezolanos con padecimientos oftalmológicos resultaron beneficiados en el 2017 con intervenciones quirúrgicas para la atención de su afección como parte del programa social Misión Milagro.
En 21 de los 24 estados del país se aplica en la actualidad el novedoso producto médico cubano contra la úlcera del pie diabético, Heberprot-P, que ha mejorado la vida de unos 300000 pacientes en el mundo.
Otros sectores como el deporte, la cultura y la educación también resultaron beneficiados. Mediante el método educativo cubano “Yo sí puedo” y la Misión Robinson Venezuela fue declarada país libre de analfabetismo.
A esa colaboración es la que apunta Washington ahora con su nueva ronda de sanciones.