È una delle più entusiaste anti-cubane che chiede più blocco, la chiusura totale dei viaggi e impedire le rimesse
Raúl Antonio Capote www.granma.cu
Un nuovo contendente ha la lobby anti-cubana negli USA nella sua frenetica corsa per avere meriti davanti al potere imperiale, e così scalare posizioni nella politica di quel paese. Si tratta della neoeletta congressista María Elvira Salazar, che occupa o scranno del distretto 27 di Miami.
Si è candidata “per impedire l’instaurazione del socialismo e rovinare gli USA”, ha dichiarato nella sua campagna, qualcosa di veramente assurdo, ma che fa parte del discorso dell’estrema destra USA.
La congressista è membro, insieme a Carlos Giménez, Nicole Malliotakis, Albio Sires, Mario Díaz-Balart, Alex Mooney, Anthony González e i senatori Marco Rubio, Ted Cruz e Bob Menéndez, il gruppo di dieci cubano-americani al Congresso USA .
Appena arrivata, ha iniziato il suo lavoro con un disegno di legge, co-sponsorizzato da altri politici di origine cubana, che pretende impedire una normalizzazione dei rapporti tra USA e Cuba.
La proposta cerca di far sì che l’amministrazione democratica di Joe Biden non possa rimuovere la Maggiore delle Antille dalla falsa lista dei paesi che promuovono e finanziano il terrorismo, da cui era stata esclusa dall’allora presidente Barack Obama, nel 2015.
María Elvira Salazar, con una lunga carriera anti-cubana, per molti anni ha partecipato, dai media, a ogni campagna condotta contro l’isola.
Un semplice sguardo ai suoi profili nelle reti sociali ci permette di apprezzare il suo “attivismo”. Nei tweet abbondano appelli ad un maggiore blocco contro Cuba, alla chiusura totale dei viaggi, all’impedire l’arrivo delle rimesse familiari, ecc.
Recentemente ha sostenuto la cosiddetta carovana anticomunista svoltasi a Miami e ha qualificato come “ignorante” un gruppo di democratici che sostiene la revoca delle sanzioni contro il popolo cubano.
Il 2 febbraio ha lanciato, tramite Twitter, la calunnia che incolpa le autorità cubane per avvelenamento di animali domestici, avviando una campagna di discredito, una delle tante a cui ha partecipato da protagonista.
La funzionaria USA che, inoltre, è membro della Commissione per le Relazioni Estere del Congresso USA, è determinata a sfidare Marco Rubio, Ted Cruz, Bob Menéndez e, ovviamente, l’ “eminenza grigia”, Claver-Carone, presidente del Banco Interamericano di Sviluppo (BID), per il posto del “peggiore tra tutti i politici di origine cubana”, posizione che si disputano, attualmente, Rubio e Ted Cruz.
È una gara per vedere chi può superare la malvagità proposta dall’altro, chi aggiunge l’idea peggiore, quella che può fare più danni. Non perché dominino o abbiano una reale influenza sulla politica USA verso Cuba, poiché è chiaro che loro non la tracciano, ma sanno che il padrone che li paga osserva, apprezza e premia i loro sforzi.
María Elvira Salazar: «yo, la peor de todos
Se trata de una de las más entusiastas anticubanas que pide más bloqueo, el cierre total de los viajes e impedir las remesas
Autor: Raúl Antonio
Un nuevo contendiente tiene el lobby anticubano en Estados Unidos en su frenética carrera por hacer méritos ante el poder imperial, y escalar así posiciones en la política de ese país. Se trata de la recién electa congresista María Elvira Salazar, quien ocupa el escaño del distrito 27 en Miami.
Se postuló «para evitar que se establezca el socialismo y arruine a Estados Unidos», declaró en su campaña, algo verdaderamente absurdo, pero que forma parte del discurso de la ultraderecha estadounidense.
La congresista integra, junto a Carlos Giménez, Nicole Malliotakis, Albio Sires, Mario Díaz-Balart, Alex Mooney, Anthony González y los senadores Marco Rubio, Ted Cruz y Bob Menéndez, el grupo de diez cubanoamericanos en el Congreso de Estados Unidos.
Recién llegada, inició su labor con un proyecto de ley, copatrocinado por otros políticos de ascendencia cubana, que pretende impedir una normalización de las relaciones entre EE. UU. y Cuba.
La propuesta busca que la administración demócrata de Joe Biden no pueda retirar a la Mayor de las Antillas de la espuria lista de países que promueven y financian el terrorismo, de donde había sido excluida por el entonces presidente Barack Obama, en 2015.
María Elvira Salazar, de larga trayectoria anticubana, por muchos años participó, desde los medios, en cuanta campaña se realizó contra la Isla.
Una simple mirada a sus perfiles en las redes sociales nos permite apreciar su «activismo». En los tuits abundan llamados a más bloqueo contra Cuba, al cierre total de los viajes, a impedir la llegada de remesas familiares, etc.
Recientemente apoyó la llamada caravana anticomunista realizada en Miami, y calificó de «ignorantes» a un grupo de demócratas que aboga por el levantamiento de sanciones contra el pueblo cubano.
El 2 de febrero lanzó, a través de Twitter, la calumnia que culpa a las autoridades cubanas del envenenamiento de mascotas, dando inicio a una campaña de descrédito, una más de las tantas en las que ha participado de forma protagónica.
La funcionaria estadounidense, quien, además, integra el Comité de Relaciones Exteriores del Congreso de EE. UU., está decidida a retar a Marco Rubio, Ted Cruz, Bob Menéndez y, por supuesto, a la «eminencia gris», Claver-Carone, presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), por el puesto de «el peor de todos los políticos de origen cubano», lugar que se disputan, en estos tiempos, Rubio y Ted Cruz.
Es una competencia para ver quién logra superar la maldad propuesta por el otro, quién suma la peor idea, la que más daño pueda hacer. No porque dominen ni tengan influencia real en la política de EE. UU. hacia Cuba, pues está claro que ellos no la trazan, pero saben que el amo que les paga mira, aprecia y premia sus esfuerzos.